Los Jardines de Alfabia representan uno de los enclaves mágicos de la Mallorca más auténtica y genuina. Situados al abrigo de la Serra de Tramuntana, en la ladera sur del Coll de Sóller, conforman un conjunto de excepcional belleza y armonía, cuya visita nos aporta otro punto de descubrimiento y conocimiento de la cultura balear.

El jardín y la casa de “Alfabia” forman un conjunto declarado Bien de Interés Cultural, con categoría de monumento.

Pérgolas, saltos de agua, fuentes, muros de piedra, balaustradas, estatuas, caminos empedrados, estanques, escalinatas y demás elementos constructivos nos descubren un jardín lleno de detalles, composiciones y ejemplares únicos que convienten la visita en “algo” más que un momento de desconexión de la rutina diaria y de agradable paz y tranquilidad.

Aprovechando el puente escolar, a finales de febrero, realizamos su visita con nuestros hijos y os adjuntamos unas fotos del recorrido por lo interesante e instructivo que nos resultó a toda la familia.

En la parte noble de la casa, destinada hoy a museo, se exhiben “El llibre de les franqueses” que el Rey Jaime I dió a Mallorca en el 1246 y la silla gótica manufacturada en Flandes en el 1407, conocida como “la cadira del rei moro”.

Nos llamó especialmente la atención la “clasta” o patio interior con su inmenso y centenario “Plater” (Platero, Platanus orientalis).

Las instalaciones adyacentes a las que comunica este patio interior o clausto, como capilla, cuadras y almazara (sorpresa inesperada para nuestros hijos quienes disfrutaron con nuestras explicaciones y recreación del proceso de elaboración del aceite) conforman un valor añadido más a la visita de “Alfabia”.

Finalizamos nuestro recorrido admirando el artesonado almohade, pieza del año 1220, situado a la entrada de la casa (habíamos empezado la visita por los jardines). Fue encargado por Ben-Abet, Virrey árabe para quien se creó “Alfabia” como residencia.